Soy diabético. ¿Tengo más riesgo de presentar problemas en mis pies?
Los pacientes con diabetes tienen más probabilidades que los demás de tener problemas en sus pies.  Estos problemas pueden producir infecciones peligrosas en los pies, que pueden llevar a la amputación. Reconocer y tratar precozmente estos problemas puede evitar grandes complicaciones.

¿Cómo afecta la diabetes a los pies?
La diabetes afecta a los pies principalmente de dos maneras. Puede provocar daño en los nervios  y puede provocar un estrechamiento de los vasos sanguíneos.
La neuropatía diabética afecta principalmente a los nervios que transmiten las sensaciones de los pies, por ello las primeras formas de manifestación serán una  sensación de entumecimiento y hormigueo.  Al final el paciente  tendrá una ausencia de dolor en el pie, que puede provocar que una ampolla o un pequeño corte pasen desapercibidos.  La pérdida de sensibilidad también puede alterar el apoyo normal, con lo que  llegan a producirse pequeñas fracturas indoloras o incluso ampollas y otras lesiones difíciles de curar.
El estrechamiento de los vasos sanguíneos  provocará que llegue menos sangre a los pies.  Con menos sangre, el pie no tendrá suficiente  oxígeno y nutrientes para curar las heridas y combatir las infecciones.  Una pequeña herida que ha pasado desapercibida, con un aporte sanguíneo deficiente, puede infectarse y provocar una gangrena.  La gangrena es una situación grave que frecuentemente requerirá la amputación de toda la zona afectada.

¿Cómo prevenir problemas en los pies en el paciente diabético?
El buen control de los niveles de azúcar en sangre ayuda a retrasar o prevenir los problemas de los pies asociados con la diabetes. Además los pacientes diabéticos deberán cuidar sus pies lavándolos diariamente, cortando  las uñas cuidadosamente y revisándolos  en busca de pequeñas lesiones o infecciones. Es muy recomendable el uso de calzado adecuado y visitar a su especialista  regularmente.


¿Qué es la aterosclerosis?
 Esta enfermedad es la principal causa de muerte en el primer mundo o países occidentales. Las arterias son los conductos encargados de distribuir la sangre oxigenada y con nutrientes por todo el organismo.  La aterosclerosis se caracteriza por el acúmulo de colesterol y otras sustancias indeseables  en la pared arterial, que poco a poco van  condicionando un engrosamiento de la misma así como  el estrechamiento de su luz. La situación final es la obstrucción total de la arteria, que condiciona un bloqueo del aporte sanguíneo al territorio en cuestión. Según la localización donde se produzca la obstrucción arterial tendremos distintas manifestaciones clínicas. Así en el cerebro puede provocar un ictus o apoplejía, en las arterias coronarias del corazón condicionará en un infarto de miocardio, y en las extremidades provocará un síndrome de isquemia crónica, que en ocasiones puede conducir a la amputación de la extremidad.


¿Cuáles son los factores de riesgo de la aterosclerosis?
 La aterosclerosis se asocia a un estilo de vida poco saludable.  Tenemos un grupo de  factores desencadenantes no modificables, sobre los que no podremos actuar, que son la edad (su incidencia aumenta con la edad), el sexo (las hormonas femeninas nos protegen y la tasa de estas enfermedades aumenta tras la menopausia), y los antecedentes familiares y alteraciones genéticas.
Pero existe otro grupo de factores  que denominamos modificables y sobre ellos sí tendremos posibilidad de intervenir. Son la hiperlipidemia , que podremos combatir con una dieta saludable y baja en grasas, y cuando es preciso con la medicación adecuada. La hipertensión arterial, convertida  al igual que la anterior en una auténtica plaga de nuestro tiempo. El tabaquismo,  que tiene una relación muy directa con todos los problemas vasculares que vemos a diario en la consulta. Y  la diabetes mellitus; sólo un buen control de los niveles de glucosa en sangre nos ayudará a retrasar o evitar  las complicaciones que conlleva sobre el aparato circulatorio.
 Prácticamente todos los parámetros de estos factores de riesgo modificables mejorarán realizando ejercicio físico diariamente y llevando un dieta adecuada.